Los filtros de agua LifeStraw
La supervivencia sin agua potable y los filtros portátiles
Seguimos en esta categoría de SUPERVIVENCIA. En el artículo anterior estuvimos hablando de una forma casera de potabilizar el agua cuando sospechamos que pueda estar contaminada por microorganismos. Hay que evitar a toda costa que podamos sufrir una infección o problemas gastrointestinales, puesto que así perderíamos mucha más agua de la que podríamos obtener. La solución: los filtros de agua portátiles.
Aunque lo de conseguir hervir agua contenida en una botella de plástico nos puede salvar la vida en determinados casos al límite, hay medios más modernos para conseguir filtrar agua de dudosa procedencia. Se conocemos como filtros de agua portátiles. Hay algunos muy interesantes que vamos a comentar, como el LIFESTRAW.
Filtros de agua LIFESTRAW
¿Te acuerdas del artículo en la vida cotidiana donde le dijimos adiós al gusano de Guinea?Pues uno de los promotores de esta buena noticia, la casi extinción del gusano de Guinea, se debe a uno de estos filtros de agua. Si recordáis, la dracunculiasis (enfermedad de la lombriz de Guinea), el parásito que origina esta horrible enfermedad, suele vivir en el agua. Cuando un animal o el propio ser humano bebía de ese lecho de agua, podía absorberlo y originar la enfermedad. La solución, un filtro de este tipo, como el LifeStraw, que dispone de un filtro por el que el parásito no puede ser tragado por la persona que está bebiendo agua.
Ahora bien, este filtro portátil de agua también es válido para casos de supervivencia. Tiene un tamaño muy reducido (cabe en la mochila), pesa poco (no llega a 100 gramos) y elimina el 99,99 % de las bacterias, 98,5 % de los virus y un 99,9 % de los microorganismos protozozarios.
- Escherichia coli
- Vibrio cholerae
- Pseudomonas aeruginosa
- Shigella
- Salmonella
- Campylobacter
Esto lo consigue bloqueando el paso de cualquier partícula que sea superior a las 15 micras. Además, el agua pasa por varias cámaras que contienen carbón activo (¿os acordáis del artículo de las tostadas quemadas y el carbón activo?) y yodo, de forma que consiguen mejorar el sabor del agua.
¿El precio? Pues depende de la tienda que lo ofrezca pero alrededor de 20 € (más gastos de envío), aunque para envíos humanitarios suele costar unos 3.5 €.
Si queréis comprarlo, lo podéis hacer a través de Dibeas Trading S.L. o Ferrehogar.
¿Pero qué hay de los metales pesados?
Pues como también sucede cuando hervimos agua, eliminamos un porcentaje altísimo de patógenos dañinos, pero no los metales pesados que pueda contener el lecho de agua de la cuál nos estamos sirviendo.
Con el filtro LifeStraw tampoco lo conseguimos. Aunque tiene una malla que impide el paso de partículas mayores a las 15 micras, aquellos materiales que sean inferiores a ese tamaño nos los estamos metiendo entre pecho y espalda. Bueno, se supone que cuando utilizamos este aparato es por causa de fuerza mayor, ¿no?
Tenéis que saber también que si pensáis guardar el LifeStraw en vuestro hiperbunker protector de los ataques zombies, tenéis que renovarlo cada año o al menos cada 700 litros de agua. No creo que se de el caso de lo último, pero bueno, nunca se sabe, y más conociendo las guerras actuales que hay en el planeta.
Para terminar, nuestro típico vídeo de Youtube, que deja todo mucho más claro. ¡Que lo disfrutéis!
Un saludo. La vida cotidiana.