Benzoato de sodio: usos y posibles problemas para la salud
El benzoato de sodio es un conservante incorporado a algunos refrescos, alimentos envasados y productos de cuidado personal, cuyo objetivo es alargar la fecha de caducidad.
A día de hoy, existe una doble concepción de este conservante, donde algunos lo consideran una sustancia inofensiva y otros lo relacionan con problemas graves de salud, como el cáncer.
En este artículo queremos conocer a fondo cuál es la opinión científica del benzoato de sodio, conociendo sus usos principales y problemas relacionados de seguridad.
¿Qué es el benzoato de sodio?
El benzoato de sodio es un conservante alimentario utilizado en productos procesados y bebidas con el objetivo de alargar su vida útil, aunque también ofrece otros usos interesantes.
Químicamente, es un polvo de apariencia cristalino y sin olor elaborado a partir de la combinación de ácido benzoico más hidróxido de sodio. El ácido benzoico es un gran agente conservante por sí solo, pero cuando combina con hidróxido sódico facilita su disolución con los alimentos.
Sin embargo, el benzoato de sodio no se produce de forma natural, aunque sí se obtiene de una gran cantidad de plantas como la canela, el tomate, el clavo, algunas bayas, ciruelas, manzanas y arándanos.
En el proceso de fermantación de los lácteos, fomentado por algunas bacterias para producir el yogur, también se obtiene el subproducto de ácido benzoico.
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Usos industrial del benzoato
Además del uso alimentario que se da al benzoato de sodio, también se utiliza para estabilizar algunos medicamentos, productos cosméticos, para cuidado personal y productos industriales.
Alimentos y bebidas
El benzoato de sodio es uno de los primeros conservantes que llegaron a la industria alimentaria, y uno de los más utilizados. Está considerado y reconocido como un aditivo seguro, lo que se traduce en que los expertos lo consideran seguro a las dosis recomendadas.
Tiene aprobación internacional como aditivo alimentario y se le asigna el número de identificación E-211 en los alimentos europeos.
Su acción se basa en inhibir el desarrollo de bacterias que pueden ser patógenas para el ser humano y los animales. Su acción bactericida se potencia en alimentos ácidos. Por ello, se usa masivamente en refrescos de tipo ácido, como zumos encurtidos, gelatinas, salsas de ensaladas, soja y otros condimentos.
Medicamentos
Aquellos medicamentos líquidos, como los jarabes para la tos, pueden llevar agentes conservantes para garantizar un periodo de caducidad superior, y por tanto pueden llevar benzoato de sodio entre sus componentes.
También tiene la función de actuar como lubricante en la elaboración de pastillas y tabletas, facilitando su disolución cuando nos las introducimos en la boca.
A nivel salud, el benzoato de sodio se utiliza en concentraciones más altas cuando existe toxicidad por amoníaco en sangre, hecho que ocurre cuando se produce la descomposición proteínica por un problema previo.
Otros usos
En cosmética, el benzoato de sodio es utilizado como agente conservante para cremas, lociones, toallitas para bebés, geles, champús y pasta de dientes, entre otros.
Cualquier elemento susceptible de deteriorarse por la aparición de hongos y bacterias, puede llevar este aditivo.
En industria automovilística, también se puede utilizar en refrigerantes y aceites, para evitar su corrosión.
Posibles problemas de salud
En general, existe una gran desconfianza de los aditivos, considerándolos antinaturales. Ya vimos los problemas derivados del carragenato, y el benzoato de sodio también recibe críticas. Ante esto, es necesario evaluar qué información científica y de rigor existe para ver si el miedo es infundado.
¿Posible agente cancerígeno?
Una gran preocupación en la población es la posible transformación del benzoato de sodio en sustancias relacionadas con el benceno, un potencial carcinógeno. Esta sustancia puede formarse en refrescos y otras bebidas que contienen benzoato de sodio junto con vitamina C (ácido ascórbico) (8 Fuente confiable)
Según el Centro de Seguridad Alimentaria y Nutrición Aplicada (CFSAN), de casi 200 muestras de refrescos y otras bebidas analizadas entre 2005 y mayo de 2007, algunos productos contenían hasta 5 partes por billón (ppb) de benceno.
Sin embargo, estas bebidas que dieron positivo en esta sustancia, han reformulado su proceso y garantizan un contenido inferior a 1,5 ppb de benceno.
Esta sustancia también puede estar en el agua, donde la Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. ha establecido un nivel máximo permitido en el agua potable de 5 ppb de benceno.
La agencia regulatoria de alimentos considera que cantidades inferiores a las dosis comentadas no representan un riesgo para la salud. Aún así, son necesarios estudios a largo plazo que evalúen la relación entre el consumo regular de bajos niveles de benceno y el riesgo de sufrir algún tipo de cáncer.
Otras posibles preocupaciones de salud
Los estudios científicos han evaluado otros posibles riesgos del benzoato de sodio, entre ellos los siguientes:
- Inflamación: estudios realizados en animales confirman que el benzoato de sodio puede activar las vías inflamatorias del organismo dependiendo de la cantidad consumida de benzoato de sodio. Esto incluye inflamación que promueve el desarrollo del cáncer. [Aditivos alimentarios e inflamación]
- Trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH): un estudio científico relacionó el TDAH con una mayor ingesta de benzoato de sodio en las bebidas en estudiantes universitarios. [ver estudio]
- Relación con el apetito: un estudio de laboratorio con células grasas de ratón, la exposición al benzoato de sodio disminuyó la liberación de leptina, una hormona que reduce del apetito. La disminución fue en proporción directa a la exposición.
- Estrés oxidativo: los estudios de probeta sugieren que cuanto mayor es la concentración de benzoato de sodio, mayor número de radicales libres se crean. Estos radicales libres pueden crear daño celular por oxidación e incrementar el riesgo de sufrir enfermedades crónicas.
- Alergias: existe un pequeño porcentaje de personas que puede sufrir reacciones alérgicas (picazón e hinchazón) tras ingerir alimentos o usar cosméticos que contienen benzoato de sodio.
Sin embargo, se necesita desarrollar más a largo plazo toda la fuente de información científica para llegar a conclusiones con mayor fuerza.
Beneficios del benzoato de sodio
No todo son referencias negativas en cuanto al uso del benzoato de sodio, ya que hay estudios científicos que relacionan su consumo con el tratamiento de afecciones y enfermedades.
Este aditivo reduce los niveles de amoníaco en sangre, algo que suele ocurrir en personas con enfermedad hepática o trastornos del ciclo de la urea y no pueden eliminar esta sustancia a través de la orina.
Algunos usos beneficiosos del benzoato de sodio en fase de investigación son los siguientes:
- Esquizofrenia: en un estudio de 6 semanas de duración, la ingesta de 1.000 mg de benzoato de sodio diario sumado a terapia farmacológica estándar lograron reducir los síntomas relacionados con la esquizofrenia en un 21% comparativamente con un placebo. [Benzoato de sodio y esquizofrenia]
- Esclerosis múltiple: estudios preliminares realizados en animales relacionan el benzoato de sodio con el retraso en el avance de la esclerosis múltiple. Esto puede estar relacionado con la producción de mielina, la cubierta protectora del sistema nervioso.
A pesar de los posibles beneficios comentados, están aun en fase de supervisión y necesitan mayor información y desarrollo para obtener conclusiones.
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Seguridad general
La administración sanitaria permite el uso de hasta un 0,1% p/p de concentración de benzoato de sodio en alimentos y bebidas. Si se usa, debe incluirse en la lista de ingredientes y estar referido en etiqueta.
Nuestro organismo no acumula benzoato de sodio, ya que se metaboliza y excreta en la orina en un periodo aproximado de 24 horas.
La OMS ha establecido la cantidad diaria recomendable (CDR) para benzoato de sodio máxima de 5 mg/kg de peso corporal. Mediante una dieta normal y saludable, es imposible superar esta dosis de concentración.
Sin embargo, puede existir personas con mayor sensibilidad y tener efectos negativos con cantidades significativamente menores. Por tanto, será necesario consultar a un médico para realizar una prueba de diagnóstico si se sospecha adecuada si sospecha que se es alérgico al benzoato de sodio.
Resumen general
El benzoato de sodio se considera seguro siempre que no se supere la cantidad diaria de 5 mg/kg de peso corporal. En algunos casos, se ha relacionado este aditivo con un mayor riesgo de problemas inflamación , TDAH y estrés oxidativo, pero se necesita más investigación.
En cualquier caso, siempre es aconsejable reducir la ingesta de alimentos procesados y bebidas azucaradas, buscando opciones más naturales.