Curiosidades de los sonámbulos
Todo lo que rodea a los sonámbulos nos parece intrigante y curioso. Es un problema que afecta a bastantes personas (en mayor o menor medida) y la mayoría de las personas no sabemos como actuar ante un caso de sonambulismo. Despertarlos, no molestarlos, quien sabe. Hoy, en la vida cotidiana, vamos a conocer algunas curiosidades de los sonámbulos.
¿Es peligroso despertar a un sonámbulo?
Básicamente, el sonambulismo es un trastorno del sueño en el que se generan actividades motoras de forma inconsciente cuando la persona afectada está dormida.
Un mito que podemos ver en muchas series y películas es que el sonámbulo se mueve con los ojos abiertos y no con los ojos cerrados (lo cuál aumenta gradiente del miedo cuando los vemos). No hay muchas más explicaciones al respecto porque, simplemente no se conocen. Ni se sabe por qué se produce ni hay solución.
¿Hablamos de datos? Aunque parece que ser sonámbulo es ser un bicho raro, lo sufre cerca del 20 % de la población, con mayor incidencia en hombres que en mujeres. Eso sí, no todos se despiertan y comienzan a andar por los pasillos. Esa grupo de sonámbulos es bastante menos común. Pero es sorprendente comprobar como una persona así puede incluso orinar estando dormido.
Algunas investigaciones acerca del sonambulismo
Ciertas investigaciones recientes han averiguado que la falta de sueño induce al sonambulismo. Se realizó un estudio con 40 personas susceptibles de sufrir noctambulismo y se les mantuvo despiertos durante 24 horas seguidas. Una vez se fueron a la cama, el 90 % se despertó durante el sueño. Sin embargo, creando un hábito en el que las personas afectadas se acostaban y despertaban a la misma vez se reducía el factor de incidencia en un 50 %. Por eso es tan importante dormir bien.
¿Es peligroso despertar a un sonámbulo?
Uno de los grandes mitos que rodean a la vida cotidiana es que es peligroso intentar despertar a un sonámbulo. ¿La respuesta? MITO. ¡Otro mito destripado! Despertar a un sonámbulo tiene el mismo efecto que despertar a una persona normal que está durmiendo. Sólo que parece que nos da miedo porque dicha persona sonámbula tiene los ojos abiertos y va andando por la casa. Eso sí, lo que no se debe hacer es despertarlo con energía, ya que se asustaría (como cualquier persona normal). Hay que hacerlo de forma suave o bien intentar que se duerma en la cama de nuevo.
¡Ah! por cierto. tampoco levantan las manos como los zombis.
¿Qué hacer si vemos un sonámbulo?
Imagina que, en medio de la noche, te despiertas oyendo extraños ruidos que provienen de la habitación de tu hermano/a. Te acercas y ves como está moviéndose de un lado a otro, intentando coger cosas o hablando incoherencias. Observas como tiene los ojos abiertos que están mirando hacia arriba (no te preocupes, es la posición normal de los ojos mientras duermes para evitar la entrada de luz en las pupilas.
Lo que tienes que hacer es normalizar la situación. Puedes acompañarle a su cama e intentar que se acueste otra vez. Piensa que el mayor peligro de un sonámbulo es el mismo. Puede coger cosas como cuchillos o elementos afilados, así como caerse por las escaleras o tropezarse con cualquier objeto (a pesar de que tienen los ojos abiertos).
En Inglaterra se ha dado un caso de una mujer que amaneció en lo alto de una grúa y tuvo que ser rescata por los bomberos al día siguiente
A menudo, un sonámbulo realiza actividades cotidianas, tales como intentar limpiar algo (moviendo las manos), leer, ordenar, etc. Se han hecho estudios que afirman que intentar explicarles que ya han acabado la tarea ayuda a que la finalicen. «Parece que ya has ordenado tu habitación, vuelve a la cama».
Una última curiosidad. ¿Eres sonámbulo? Pues tus hijos tendrán una probabilidad del 60 % de padecerlo también. Además, tampoco es exclusivo de los humanos. Mira este curioso vídeo sobre perros sonámbulos. 😉