¿Por qué nos hace la cebolla llorar?
¿Quién no ha llorado cortando cebollas?
Repasando unas fotos con el staff de la vida cotidiana y amigos, he recordado una macro-cena mejicana de hace unas semanas y adivinad a quién le toco cortar el kilo de cebollas… Si… ¡a mí! . Ríos de lágrimas corrían por mis mejillas, pero, ¿Por qué ocurre esto?.
Vamos a explicarlo de forma sencilla, como siempre en La vida cotidiana.
Todo el mundo sabe lo que es una cebolla pero no muchos conocen sus amplias propiedades, podría resumirlas en: Antifúngico, antibacteriano, antiinflamatorio, antidiabético, antiasmático, previene el cáncer, mejora algunas afecciones cardiovasculares, antireumático, etc. La verdad es que si saco los apuntes de farmacognosia tengo para varias páginas.
Estas propiedades se las confieren principalmente sus derivados sulfurados (contienen azufre). Que por cierto son parecidos a los del ajo, y por eso el ajo tiene prácticamente las mismas propiedades que la cebolla, de hecho el ajo es mucho más potente, ya que requiere una menor cantidad para el mismo efecto o mayor.
¿Por qué nos hace la cebolla llorar?
Cuando cortamos la cebolla, estamos provocando roturas en sus tejidos por lo que se libera una enzima llamada alinasa que al entrar en contacto con los derivados sulfurados de la cebolla (en concreto el trans-(+)-S-(1-propenil)-L-cisteina sulfóxido) reacciona formando piruvato, amoniaco y syn-propanotial-S-óxido. Siendo éste último el responsable del lagrimeo y la irritación ocular.
El mecanismo de acción del syn-propanotial-S-óxido no se conoce con certeza. Se cree que al entrar en contacto con el agua (del ojo) se descompone en ácido sulfhídrico, propanal y ácido sulfúrico.
Por lo que este ácido sulfúrico irritaría la membrana corneal y nuestro cuerpo, como mecanismo de defensa, produciría el lagrimeo (haciéndonos llorar) para diluir el ácido y expulsarlo de nuestro ojo.
¡Espero que se entienda!
Un saludo. La vida cotidiana.