Descubre las propiedades del té blanco
Dentro del mercado de las infusiones, tenemos un gran abanico donde elegir. Pasamos desde el típico té rojo o verde, hasta la clásica manzanilla o poleo menta. Sin embargo, tenemos mucho donde elegir, y uno de ellos, el té blanco, con muchas posibilidades a nivel medicinal.
¿De dónde proviene el té blanco?
Nombre científico: Camellia sinensis
Procedencia: China (provincia de Fujian), este de Nepal, este de Tailandia, Taiwán, Sri Lanka e India.
La planta Camellia sinensis, conocida como la planta del té, es la gran productora de distintas familias de infusiones, empezando por el té rojo, verde y blanco.
La diferencia que existe es el proceso de transformación y oxidación entre ellos. Su extracción es específica, concretamente de las yemas y hojas jóvenes de esta planta, dejándolas marchitar ligeramente para obtener el característico color.
Por estas características, hace que su contenido en teína y otros componentes difiera y sea mucho más digestivo.
A día de hoy no hay referencias muy claras sobre el origen y descubrimiento del té blanco, ya que algunas versiones aseguran que su uso fue anterior al té blanco o rojo, y otras especifican justo lo contrario.
Lo que sí está claro es que su consumo mundial es menor que otros tipos de infusiones, como el té negro, rojo o verde, pero poco a poco se está extendido a medida que se realizan investigaciones sobre su funcionalidad médica.
Lo que sí es indudable, dado la gran magnitud de ensayos científicos, son las propiedades del té blanco beneficiosas para el organismo.
¿Dónde se cultiva el té blanco?
Esta planta es originaria de China, concretamente de la provinicia de Fujian. Aún tiene una larga trayectoria de cultivo y las producciones que se obtiene de dicha zona alcanzan un gran valor.
Geográficamente, el cultivo del té blanco se ha extendido dado el incremento en la demanda. Por eso, también podemos ver plantaciones en países como Japón, India, Sri Lanka, y Kenia. Éste último, tiene su propia «denominación de origen» y una larga trayectoria en la producción de diferentes variedades autóctonas de café y té.
El té producido en Japón es prácticamente para autoconsumo y muy poca producción sale de sus fronteras. Produce uno de los más valorados a nivel mundial, y muy caro. La zona por excelencia de su cultivo es la región de Fukuoka, en Yame.
En Kenia, podemos encontrar uno de los sabores más fuertes y pronunciados de té que, como hemos dicho, tienen variedades autóctonas.
Sri Lanka ha comenzado fuerte la plantación del té blanco, aumentando cada vez más la superficie e intentando conquistar el mercado de exportación, con un té con agradable sabor y características muy aromáticas.
En la India existe una región particular cerca del Himalaya donde se obtienen plantaciones de elevada calidad.
Tipos de té blanco
Aunque la procedencia sea de la misma especie de árbol, podemos encontrar sub-variedades que se cultivan en distintas zonas climáticas y, por tanto, se obtiene versiones ligeramente distintas, al igual que se modifican ligeramente las propiedades del té blanco.
- Gong Mei
- Bai Hao Yinzhen
- Bai Mu Dan
- Shou Mei
- Té blanco de Puerh
Composición del té blanco
Catequinas: muchas de las propiedades del té blanco se deben a su contenido en una variedad de catequinas activas, incluido el EGCG, que es muy útil para combatir enfermedades crónicas como el cáncer (galato y epigalocatequina).
Antioxidantes: con un nivel ligeramente superior en polifenoles frente al té verde.
Taninos: el nivel de taninos es inferior a otros tipos de té (negro, rojo, verde, etc.) pero destaca por su actividad protectora del sistema cardiovascular.
Teaflavinas: son polifenoles íntimamente relacionados con el té, que afectan directamente sobre el amargor y la astringencia del té.
Igualmente, el nivel de teaflavinas presentes en las propiedades del té blanco son ligeramente inferiores a otros tés más concentrados, como el negro o el verde.
Tearubiginas: son las sustancias responsables de la coloración típica de este tipo de infusiones. Muy estudiadas por sus propiedades antioxidantes y reductoras del azúcar en sangre. Cuanto más color tiene el té, más presencia de tearubiginas, como ocurre en el té negro.
Todos estos compuestos, en distintas concentraciones y sumado a algunos que no habiendo sido mencionados también aportan un beneficio, configuran las propiedades del té blanco y son los que dan pie a los resultados científicos obtenidos.
¿Qué tiene de especial el té blanco? Los niveles de teína
Para la gente que no tolere altas concentraciones de teína, con las propiedades del té blanco va a estar de suerte.
Por su proceso de obtención y el hecho de sólo seleccionar las hojas jóvenes, su concentración este compuesto es realmente baja, comparativamente con otras infusiones.
Vamos a ver en esta imagen una tabla comparativa de la cantidad de teína que contienen distintas infusiones y el café (cafeína).
Su volumen en antioxidantes es superior a la ristra de otros tés (que provienen del mismo árbol), pero ello también conlleva que su contenido en teína se encuentre por debajo de 1 mg por taza.
¿Cuáles son las propiedades del té blanco?
Alto contenido en antioxidantes
En comparación con las distintas infusiones que podemos encontrar en el supermercado, las propiedades del té verde destacan por su mayor concentración en elementos antioxidantes.
Si hablamos de números, el té verde contiene 3 veces más polifenoles que el té verde, aunque se sabe que la actividad antioxidante llega a ser prácticamente la misma.
[su_box title=»¿Qué son los polifenoles?» style=»default» box_color=»#333333″ title_color=»#FFFFFF» radius=»3″ class=»»]Los polifenoles son sustancias químicas encontradas en distintas plantas y que destacan por su actividad antioxidante. Existen numerosos beneficios en el ser humano como la prevención de enfermedades cardiovasculares y están siendo investigados por su posible acción frente al desarrollo de cáncer[/su_box]
Concretamente, en esos polifenoles encontramos unas partículas de vital importancia conocidas como catequinas.
Estas catequinas son un metabolito secundario encontrado en diferentes especies como la mimosa o Centaurea maculosa. Tiene la especial habilidad de reducir el contenido en oxígeno libre y actuar frente a la oxidación del colesterol LDL o «malo».
Mejora el sistema circulatorio
Se han encontrado distintos estudios donde relacionan las propiedades del té verde con la reducción de enfermedades coronarias y riesgos de infarto.
Este mismo estudio relaciona un consumo de al menos 1 taza diaria de té verde con una reducción del 21% la tasa de sufrir una enfermedad de tipo coronario. [ESTUDIO]
Facilita la pérdida de peso
Existen distintas infusiones que han demostrado en ensayos la eficacia como complemento en la pérdida de peso.
Es el caso del té verde y té blanco, que contienen distintos fitoquímicos capaces de actuar a nivel enzimático en la quema de grasa.
Esto se debe al nivel de cafeína y catequinas que contienen, entre ellas también un tipo de antioxidante conocido como 3-galato de epigalocatequina (GEGC) que tiene una relación directa con la reducción de la grasa localizada. [ESTUDIO]
Esto, sumando al aumento de la actividad metabólica (incremento de entre el 4 y 5%) hace aumentar la tasa de calorías quemadas (entre 70 y 100 kcal diarias).
Retrasa el envejecimiento
En varios estudios de gran magnitud se hizo una comparación de los diferentes tipos de tés del mercado y las propiedades del té blanco para evaluar la respuesta antioxidante y el comportamiento en el retraso del envejecimiento.
De entre todos ellos, las propiedades del té blanco mostraros mejores resultados por la concentración de enzimas que reetrasaban la degradación y pérdida de componentes como la elastina o el colágeno. [ESTUDIO]
La elastina es una proteína que podemos encontrarla en diferentes tejidos como el óseo, en el tejido cartilaginoso o en el conjuntivo, y tiene una función protectora y es la que interviene en la recuperación del tejido ante un esfuerzo.
Otras infusiones, como el té de rooibos, tienen un efecto parecido, por lo que pueden combinarse para un mayor beneficio.
Propiedades antimicrobianas
Uno de los ensayos que se suele hacer de manera frecuente con la mayoría de extractos de plantas es evaluar su potencial frente al desarrollo de bacterias u hongos.
Todos conocemos la problemática mundial para frenar la evolución de las superbacterias y los bajos recursos de antibióticos que tenemos actualmente.
Este estudio, realizado en la Pace University (Nueva York) demostró una capacidad superior de las propiedades del té blanco para eliminar bacterias por encima del té verde.
En el caso de los hongos, demostró una buena respuesta ante el desarrollo de Saccharomyces cerevisiae y Penicillium chrysogenum.
Por eso, es común ver entre pastas dentífricas y colutorios el uso de las propiedades del té blanco entre sus ingredientes, al igual que otras plantas medicinales como el romero o el extracto de tomillo.
Propiedades del té blanco en el tratamiento de la diabetes
De las distintas plantas medicinales que podemos utilizar para regular los niveles de azúcar en sangre, las propiedades del té blanco pueden contribuir en esta gran acción.
Los estudios sobre el té blanco en esta materia arrojan resultados positivos (al igual que otros tipos de tés), mejorando la regulación de glucosa en pacientes enfermos [ESTUDIO].
Además, de esto, se siguen realizando ensayos en ratas para evaluar la respuesta de los distintos tipos de diabetes, con respuestas igualmente significativas y esperanzadoras [ESTUDIO].
Aunque aún se sigue investigando para mostrar más evidencias, parece ser que los resultados positivos se atribuyen a las catequinas presentes en las propiedades del té blanco.
Activa el organismo y la concentración
Indudablemente el efecto positivo de la teína en este tipo de infusiones y cafés es importante para mantener la concentración y el estado de alerta ante síntomas de sueño o cansancio.
Aunque la presencia de teína, como hemos visto en una de las imágenes de este artículo es significativamente inferior a otros tipos de tés, existe la presencia de la teína en el té blanco.
Esto se debe a la presencia de un aminoácido específico, la L-teanina, que actúa sobre el sistema nervioso produciendo una estimulación.
Con ello, también se contribuye a reducir la fatiga mental y los estados de cansancio por esfuerzo físico, además de otros beneficios como los que mostramos a continuación.
- Equilibrar los ciclos de sueño y vigilia
- Reducir los estados de ansiedad
- Reducir el estrés mental y físico
- Mejorar la cognición y el estado de ánimo de forma sinérgica con la cafeína
Actividad antiinflamatoria
De todos los compuestos presentes en las propiedades del té blanco, las catequinas son responsables de muchos efectos antiinflamatorios que vamos a describir.
Esto también se puede utilizar en casos de enfermedades que implican una inflamación crónica de distintos tejidos, como ocurre en el caso de la diabetes, algunos tipos de cáncer o arterioesclerosis.
A nivel muscular, las catequinas están implicadas en la reducción de la inflamación causado por golpes o esfuerzo físico extraordinario, como se ha documento en un estudio japonés. [ESTUDIO].
Beneficios del té blanco en el funcionamiento de los riñones
Hay un estudio de divulgación realizado el 2015 donde se estudian las propiedades de distintos té en diferentes concentraciones y su implicación en la mejora del sistema renal.
Especialmente estaba relacionado con los efectos negativos de la contaminación ambiental y su afección a distintos órganos, incluído el riñón.
Por ello, se evaluó la alimentación tradicional china, donde las propiedades del té blanco se consumen de manera frecuente, con buenos resultados debido a sus efectos antioxidantes [ESTUDIO].
Propiedades del té blanco para reforzar la memoria
Se ha estudiado profundamente el papel de las catequinas en el retraso de la pérdida de memoria en edad adulta. Esta investigación también se ha relacionado con el efecto de estas sustancias antioxidantes y la protección de la corteza cerebral. [ESTUDIO].
Por lo tanto, las propiedades del té blanco son recomendadas para personas que notan una pérdida de memoria en edad avanzada, desde el punto de vista de retrasar el deterioro cognitivo.
Cómo tomar té blanco
La forma más común de aprovecharse de las propiedades del té blanco es en forma de infusión.
En muchos establecimientos o tiendas online podemos adquirir este producto que viene en forma de sobres o directamente a granel.
En este último caso, para preparar una taza de té, añadimos 2 cucharadas pequeñas (de café) por cada taza de agua, siguiendo el mismo proceso que haríamos con la preparación de cualquier infusión.
Podemos tomar de 2 a 4 tazas diarias para aprovecharse de todos los beneficios comentados.
Opciones de compra
Te dejamos algunas opciones para aprovecharse de las propiedades del té blanco. Lo más común y lo que más ha sido sometido a estudios científicos es a través de la infusión de sus hojas.
Sin embargo, también puedes encontrar aceites para aplicación en la piel (con efecto antioxidante y antimicrobiano).
Efectos secundarios y posibles contraindicaciones
Se han estudiado incompatibilidades y contraindicaciones de las propiedades del té blanco con fármacos, posibles alergias o retraso en la absorción de minerales. Se ha comprobado como diversos flavonoides como los contenidos en el té verde son capaces de inhibir la correcta absorción del hierro no hemo al 70%, por lo que no es recomendable su consumo en personas que sufren de anemia.
¿Se puede consumir el té blanco en el embarazo?
Aunque el té blanco es una de las infusiones que menos teína contiene, hay discrepancias sobre su consumo. Determinadas entidades recomiendan su consumo a baja dosis para beneficiarse de todos los efectos anteriormente comentados.
Otras fuentes prefieren recomendar eliminar su consumo durante el periodo de embarazo y lactancia, debido a que quieren reducir al mínimo el consumo de cualquier sustancia activa relacionada con la cafeína o teína.
Lo ideal es consultar con un especialista médico si las propiedades del té blanco pueden afectar al embarazo o desarrollo del feto. Si no hay conclusiones serias, lo mejor es no tomarlo.
¿Conoces más propiedades del té blanco que no añamos anotado?