¿Para qué sirven los sulfitos en el vino?
Los sulfitos en el vino son considerados como un conservante de tipo alimentario muy usado en bebdias, ya que tiene la capacidad para conservar el sabor en el vino.
Este compuesto lo podemos encontrar en una gran variedad de bebidas y alimentos, aunque principalmente están asociados al vino. A su vez, también se relacionan con ciertos efectos secundarios basados en el consumo de vino, como el temido dolor de cabeza. ¿Qué hay de cierto en todo esto?
En este artículo vamos a revisar los distintos ensayos de la comunidad científica acerca de los sulfitos del vino. Entre las primeras conclusiones se extrae que este compuesto puede tener algunas contraindicaciones en ciertas personas, pero en otras no.
En algunas personas, existe una buena tolerancia a los sulfitos, pero otras pueden sufrir efectos secundarios leves, como dolor estomacal, urticaria o inflamación.
¿Qué son los sulfitos del vino?
Un sulfito, cuya denominación química es dióxido de azufre, es un compuestos químico ligado al ión sulfito.
Lo podemos encontrar de forma natural en algunos alimentos como huevos, productos fermentados, té negro y frutos secos como cacahuete.
Por otro lado, también lo podemos ver como conservante en una amplia variedad de alimentos como refrescos, zumos, mermeladas, salchichas y todo lo que necesite envasarse y un periodo mínimo de conservación.
Los sulfitos contenidos en el vino son empleados por enólogos para fomentar la reducción de la oxidación del vino. Además, este compuesto tiene potencial antimicrobiano, pudiendo reducir el el desarrollo de bacterias y alargar la vida útil del producto.
[su_note note_color=»#bade97″ text_color=»#333333″ radius=»3″ class=»»]El principal uso de los sulfitos del vino es la de evitar su oxidación, manteniéndolo durante el mayor tiempo posible su frescura y sabor orginal.[/su_note]
Posibles efectos secundarios
Antes hemos comentado que no todo el mundo tolera bien la ingesta de los sulfitos, incluídos los del vino.
En general, no existen inconveniente en tomarlos y están aprobados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), pero puede ir ligados a efectos secundarios de carácter leve.
Según la Universidad de Florida, cerca del 1% de la población es sensible a los sulfitos, y casi el 5% tiene asociado procesos de asma. [Ver artículo de la Universidad de Florida]
Esto quiere decir que personas que ya de por sí sufren de asma, pueden ver agravados los síntomas por los compuestos de los sulfitos en el vino y otros alimentos.
Estos compuestos también pueden causar dolores de cabeza en aquellos que son sensibles. En un estudio realizado en Lisboa (Portugal) se demostró un aumento en el número de personas que sufrían dolores de cabeza para consumo de vinos con mayor concentración de sulfitos frente a otros vinos con la tasa mínima de concentración. [Ver información]
Claro está que no solo los sulfitos del vino son los posibles causantes de dolor de cabeza, ya que podemos encontrar en este producto otros causantes como el alcohol (el principal causante), flavonoides, histamina, etc.
Entre los efectos secundarios asociados al consumo de sulfitos estarían los siguientes:
- Dolor de cabeza
- Urticaria
- Diarrea
- Hinchazón estomacal
- Dolor de estómago
- Anafilaxia
Consejos para reducir el consumo de sulfitos
Cuando ya hemos tenido varios episodios con los síntomas descritos anteriormente, es momento de ponerle freno o disminuir los efectos adversos.
El vino, de por sí, contiene pequeñas cantidades de sulfito, pero el problema, en este caso, está en el añadido artificial que se realiza. Muchos productores de vino han empezado a producir vinos que no contienen sulfitos añadidos.
Es importante saber que el vino tinto, por normal general contiene menos concentraciones de sulfitos que el vino blanco. A su vez, también hay que disminuir la ingesta de alimentos enlatados o encurtidos como albaricoques secos, encurtidos, refrescos, mermeladas, zumos, etc.
En la etiqueta de producto debe quedar bien especificado la presencia o ausencia de sulfitos. Lo podemos encontrar con varios nombres distintos, pero que significan lo mismo, como dióxido de azufre, sulfito de sodio, bisulfito de sodio, bisulfito de potasio y metabisulfito de potasio.